Hacer
Suele doler más un salto nunca dado, que sentir la vida como agua entre las manos.
Camino en estos días donde nada me levanta el ánimo. En que todo no llega ni al aburrimiento. Momentos en
Odiaba bailar en el Colón. Odiaba el salto majestuoso. Odiaba que la gente lo aplaudiera a rabiar. Pero sabía bien
Me espiás la conciencia y me llevás remolque las ganas. Entonces te sigo simulando velocidad, con mis dolores por testigos.
Que rompa la estatua su quietud y se largue a correr. Que se detenga el movimiento del mar; que al
Entre mi ateísmo y tu agnosticismo, nuestra charla mística duró una mirada cómplice. Entre nuestra sed y las copas, el
Se calla hasta por los codos y hace silencio, por lo que no pudo decir. Llora sin sonido una tristeza