Soledad

Mi teléfono obedece esa manera 

tuya de no llamar.

Si tan solo pudiéramos 

no estar tan solos,

y dejar de estar atentos 

a mostrarnos indiferentes.

Ahora ya no somos nosotros.

Ahora llenamos de vacío todo 

lo que nos decimos.

Ahora cargamos nuestros silencios

de las cosas que nos matan por dentro. 

Deja un comentario

Scroll al inicio