Apuntes de hombres tristes
Anselmo —Si el mendigo está parado y hablando con alguien, no le darán monedas —dijo Anselmo, acariciándose su barba nazarena, […]
Anselmo —Si el mendigo está parado y hablando con alguien, no le darán monedas —dijo Anselmo, acariciándose su barba nazarena, […]
A la cuarta página de haber empezado a escribir mi novela, me doy cuenta de que no tengo nada más
Al grito de “¡Viva Perón!”, saltaba en todas las lomas de burro que podía, a una velocidad que, de tener
El juego era cazar un pajarito como sea, tenerlo en la mano y pincharle uno o los dos ojos con
Lo miraba de arriba abajo como si lo estuviera escaneando. Sin fingir una mueca de asco le preguntó, con ese
Cacho mojaba la calle de tierra con la cotidiana esperanza de que los autos no levanten tanta tierra. Se cansó
No perder la elegancia, ni al levantarnos de la lona. No vivir a la sombra de nadie, aunque nos queme
Tomando estas pastillas usted decidirá no medicarse. Eso sí, las deberá tomar todos los días. Píldoras cada ocho horas y
Hola Ana. Quiero darte nuevamente las gracias por las flores que me trajiste la otra noche. Tendrías que ver cómo